lunes, 7 de abril de 2025

La reina (what if de Blancanieves)

Este fin de semana vi la nueva película de Blancanieves, y a decir verdad no me pareció tan mala como la hacen pintar, aunque admito haber bostezado unas cuantas veces (Los musicales no son mi género favorito pero tampoco los odio). 

Aun así, me dejó pensando en una idea y se trata de un final alternativo con la temática de esta comunidad. Así que les dejo esta historia corta que espero les guste.


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Luego de que todos sus planes fracasaran, la reina malvada se había rendido en su plan para ser la más bella del reino. Su hijastra Blancanieves era percibida como la más hermosa y bondadosa por parte de todas las personas, y ahora todo el pueblo se había levantado para expulsarla, con la princesa al frente.

"La manzana encantada no funcionó, ese estúpido bandido del bosque lo arruinó. Y esos enanos se encargaron de mantenerla a salvo. No los perdonaré, no perdonaré a nadie." La reina decía en su espejo, recordando como la princesa era alabada por todos, era amada y admirada: todo lo que la reina deseaba que fuese para ella.

Sabiendo que ahora ella era la villana ante los ojos de todos, no había vuelta atrás. No había rincón en el mundo donde no fuera señalada y perseguida. Así que comenzó a elaborar un último plan: el plan maestro que cambiaría todo para siempre.

Mientras escuchaba afuera el ruido de la gente, ella recitaba palabras en un idioma antiguo frente a su espejo mágico. El reflejo pasaba de tener el rostro de la reina a tener el rostro de Blancanieves. 

"Perfecto" la reina decía sonriendo mientras la habitación se llenaba de humo. El ruido de la gente se hacía cada vez más fuerte, ya habían ingresado al castillo. Blancanieves pidió a los guardias que se quedaran afuera para que ella entrara sola con la reina. A pesar de la maldad que emanaba de su madrastra, la princesa aun mantenía la esperanza de hacerla cambiar.


"Se acabó, mi reina, no puedes seguir haciendo daño a nuestro pueblo". Blancanieves le decía con una voz valiente.

La reina estaba sentada, de espaldas a la princesa, mientras se miraba en el espejo. "Mi vida era perfecta. Tenía belleza, poder y magia, ahora solo me queda la última. Cuando miro mi espejo, ¿Sabes qué es lo que veo, Blancanieves?"

La princesa se quedó en silencio, expectante de las palabras de la mujer.

"No veo a una reina poderosa, no. Tampoco veo a una mujer hermosa, amada por todos. Lo único que veo es a un simple y miserable ser que lo perdió todo". La reina dijo mientras se volteaba hacia su hijastra. "Y tú, Blancanieves, eres la razón".

"Eso es algo que tú misma provocaste, con tu envidia y tu corazón lleno de maldad. Pero esto no tiene que acabar así. Deja todo eso atrás y gobernemos juntas". La princesa le dijo con un tono más bondadoso 

"Después de todo lo que he hecho" La reina dijo con una sonrisa irónica. "Y aun quieres que esté a tu lado. Vaya cursilería. No entiendo porqué ven belleza en ser alguien tan tonto. Mejor acabemos con esto de una vez." La reina dijo mientras sacaba una daga de diamante.

"Por favor, no hagas esto, no tiene que acabar así. Podemos salir juntas y el pueblo... Yo sé que podrían llegar a perdonarte".

La reina solamente rió. "Niña, esto no va a acabar como tú piensas. Claro que saldremos juntas pero no como tú crees".

Luego de esto, la reina clavó la daga en su pecho, gritando del dolor y cerrando todas las puertas y ventanas, encerrando a ambas mujeres en la habitación. Blancanieves estaba aturdida sin saber cómo reaccionar al ver como la mujer se estaba quitando la vida frente a sus ojos. Los gritos de la reina hicieron que un humo negro comenzara a levantarse, envolviendola y haciendo que se comience a desvanecer en el aire. Pronto ese humo comenzó a envolver a la princesa. Intentó luchar para quitárselo de encima, sentía como la intentaba asfixiar. Quizo gritar para pedir ayuda pero al abrir la boca el humo empezó a introducirse en ella, paralizandola. Sus ojos comenzaron a brillar con una fuerte intensidad mientras el humo terminó de introducirse por completo en ella. 

Segundos después, ella se acercó al espejo y al mirar su reflejo, se formó una sonrisa retorcida en el rostro de la princesa. "Sí, funcionó. Esto es perfecto. ¿Sabes, niña? La verdad es que no soporto ver tu rostro pero me acostumbraré, al igual que me acostumbré a mi rostro anterior, tu madrastra puso más resistencia que tú a decir verdad, ya incluso perdí la cuenta de las reinas y princesas que he sido". La mujer miraba a detalle su nuevo cuerpo, sintiendo desprecio por el colorido vestido amarillo que llevaba. "Sí, hay mucho qué hacer contigo. Pero primero lo primero". La mujer se retorció mientras sus ojos brillaban, luego de eso expulsó un humo blanco hacia el espejo, dejando ver el espíritu de Blancanieves, ahora encerrada dentro del espejo. "Muy bien, niña, es hora de que me dejes reinar en paz" decía mientras reia de forma malvada. 

Luego de eso, la puerta se abrió, con el hombre del bosque que se habia enamorado de Blancanieves. "¿Estás bien, princesa? ¿Qué pasó con la reina?"

La mujer cambió su semblante por el de una mujer asustada. Y señaló al espejo. "Ahí, hizo algún especia de brujeria y se encerró en el espejo, y ahora quiere encerrar a todo el reino ahí. Rápido, hay que destruirlo".

El joven se acercó al espejo, el espiritu de Blancanieves intentó manifestarse para evitar que lo hiciera ya que desaparecería para siempre, sin embargo la mujer hizo un pequeño hechizo para hacerle creer al joven que en el espejo estaba reflejado el reino en llamas.

"No dejaré que nos haga más daño" gritó, mientras agarraba el espejo y lo tiraba al suelo, rompiendolo y desvaneciendo toda esperanza para siempre.

La mujer se acercó y le dio un beso al hombre para felicitarlo. Sonriendo al ver cómo su plan había resultado a la perfección.


Después de todo lo sucedido, el reino celebró la caida de la reina, nombrando a quien creían que era Blancanieves como la nueva monarca. Quien poco a poco comenzaría a realizar cambios en su apariencia, asemejandola más a su antiguo ser, con ropa oscura y una actitud déspota y fría. Todo aquél que sospechara o insinuara algo contra ella era inmediatamente ejecutado. Siendo su joven amado una de las primeras victimas. 

Años después comenzaron a surgir leyendas entre los aldeanos, sobre cómo la dulce Blancanieves había caído bajo alguna especie de maldición que oscureció su corazón. Sin saber lo que en realidad había ocurrido.





4 comentarios:

  1. INCREÍBLE historia, me encanta tu forma de escribir, transmite muchísimo. Soy la persona que te escribio en tu publicación anterior sobre Hilda. Cada vez estoy mas enamorado de tu blog, es especial para mi. Muchas gracias

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  2. Lo de hacer cambios en su apariencia para asemejarse mas a su cuerpo original... Wow eso si que demuestra control sobre el nuevo cuerpo. Gracias nuevamente ❤️

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