miércoles, 11 de agosto de 2021

El asalto de cuerpo, capítulo 4.


 La vida como una hermosa mujer estaba siendo perfecta. Tenía todo lo que quería: mucho dinero y un cuerpazo para morbosear cuando yo quisiera. Admito que en un inicio fue un poco incómodo cuando empecé a subir mis videos ya que se llenaba de comentarios de hombres, y vaya que eran comentarios bastante pervertidos. Pero con el tiempo me fui acostumbrando cada vez más. 

La verdad es que independizarme de "mis papis" fue lo mejor que pude haber hecho. Los pobrecitos se volieron locos cuando descubrieron que me hice un par de tatuajes. No imagino su reacción cuando descubran en lo que se ha convertido su pequeña niña. Tener una casa completamente sola para mí me permite mucha libertad para hacer lo que yo quiera, hasta andar desnuda o con muy poca ropa. Había colocado varios espejos para que siempre pudiera admirar mi hermoso cuerpo.


Lo único malo es que al ser mujer, tenía que soportar todos sus cambios hormonales, en especial cada mes cuando llegaba su período. En esos días simplemente quería desaparecer. Aunque viéndolo de otra perspectiva, supongo que es el precio por tener esta vida tan bella.

A la medida que mis ingresos aumentaban, también la presión lo hacía. Si bien había acumulado suficiente dinero para vivir cómodamente, yo quería más aun. Mi avaricia no se quedó en mi viejo cuerpo al parecer. Esto hacía que yo estuviera sacando cada vez más fotos y videos, al punto de acabar mi imaginación y subir fotos ya repetidas las cuales hicieron que mis ingresos fuesen menores.

Un día exploraba contenido de otras mujeres para tomar ideas, y vi a una chica muy hermosa que llevaba ya un par de años en esta industria. Sus videos eran demasiado sexys y además tenía una pareja mujer al parecer. Al ver sus videos me quedé impresionado; mis pezones y la humedad de mi entrepierna no lo podían ocultar. Después de desahogarme con un orgasmo, seguí viendo su contenido y un poco de su historia:

Era una chica hermosa, prácticamente de la misma edad que yo, o bueno, de mi cuerpo. Su nombre es Laura y al parecer era una chica común y corriente la cual un día decidió entrar a esta industria, pero incluso desde sus primeros videos la niña sabía cómo moverse y qué hacer, su caso me recordó un poco a lo que yo hice con Sofía. Me pregunto si habrá más personas ahí afuera ocupando cuerpos ajenos, o si todas las mujeres sabrán cómo ser sexys en el fondo y simplemente lo ocultan. 

Como sea, ella me había dado una gran idea. Debería conseguirme a una pareja igual de sexy que yo, eso sin duda repuntaria mis números. El problema era encontrar quién estaría dispuesta. Todos los conocidos de Sofía estaban descartados y las chicas de esta plataforma ya están bastante ocupadas. Quizás a Laura le interese hacer tríos. De cualquier manera le envié unos cuantos mensajes pero no me ha contestado. Tendré que buscar por otros medios.

Esa tarde salí a correr a un parque cercano, si bien este cuerpo es hermoso, debo esforzarme para mantenerlo en forma. La verdad es que no me cuesta trabajo ya que tengo una gran condición física. Al dar unas 3 vueltas, me senté en una de las bancas a tomar un poco de aire y agua. En eso se me acercó una chica bastante guapa. Me preguntó en dónde habia comprado mi ropa deportiva ya que le había gustado mucho. 


"La pedí por internet, si quieres pásame tu número y te mando la página" le dije mientras le guiñaba el ojo. El guiño fue involuntario, es por la costumbre de siempre intentar ligar con la chica que me gustase. Ella sonrió un poco apenada y sorprendentemente me dio su número. 

"¿Cómo me dijiste que te llamabas?" Pregunté. 

"No dije mi nombre, pero me llamo Claudia" me contestó en un tono algo coqueto. La chica no era tonta y supo mi táctica para averiguar nombres, pero se veía bastante interesada. Le di mi nombre y luego de eso me dijo que se tenía que ir. No sin antes mirar su trasero mientras ella se alejaba, vaya que tenía lindo cuerpo.

Luego de eso le di un par de  vueltas más al parque. Tenía sentimientos encontrados con las miradas morbosas de los hombres que me veían correr. Me gustaba la atención y me hacía sentir sexy, pero por otro era incómodo y me daba un poco de miedo que pudieran hacerme algo en este cuerpo indefenso. Incluso en el camino a casa sentí algunos pasos detrás de mí, pero al voltear no veia a nadie, quizás era mi imaginación. 

Al llegar a mi casa me dirigí al baño para ducharme. Llevé el teléfono conmigo ya que se había vuelto costumbre tomarme fotos o grabarme mientras me bañaba para mis fans. Me estaba desvistiendo cuando mi teléfono sonó, era un mensaje de whatsapp de Claudia, la chica del parque. En mi rostro se formó una sonrisa cuando leí su mensaje:

C = Claudia / S= Sofía
C: Hola! Soy Claudia 😜

S: Hola Clau!! Mucho gusto... pensé que no me escribirías 🤭

C: Jaja porque lo dices?? Aparte no me pasaste la página mensa 🤣

S: Es vdd! Soy una distraida jeje

C: Ntp suele pasar, de seguro andas muy ocupada..

S: Sí un poquis... pero tus mensajes me alegran el día sabes? 😌

C: Si?? Porque será? 🤔

S: Bueno es que me caiste muy bien 😉 

C: Ahh ya veo jijiji tú igual aunque solo hablamos como 2 minutos, ni nos conocemos casi jaja 

S: Siii.. qué raro no?? Pero pues hay algo en ti que me gustó 🤓

C: 😳😳😳 

S: Por que las caritas? 

C: Ehh.. bueno, es que no sé como tomar eso 😅😅 digo me caiste bien pero si suena algo raro..

S: Ohh disculpa si sone un poco raraaa no me malinterpretes cariño, es que asi suelo decir... no es nada malo 🤭🤭

C: Bueno está bien... ntp no pasa nada (:

S: Y dime... que haces?

C: Oh nada, llegaba del parque y me puse a ver una serie y tuu? Andas ocupada como siempre? 🤣

S: Jajaja mensa nada que ver... en realidad estaba a punto de darme un baño, necesito quitarme este sudor de encima 🥵🥵

C: De acuerdo, en ese caso te dejo para que te puedas jabonar bien 🙈

S: Sii luego de correr, todo mi cuerpecito se queda lleno de sudor, pero es muy relajaaaante quedarme bajo el agua 💧 

C: Si, siempre un baño es relajante... que buena descripción 😅 jeje

S: Sii me encanta, es de mis momentos favoritos.. tú ya te bañaste? 👀

C: Eh.. no, pero haces que me den ganas jeje quizás me de un baño también al rato.

S: Deberías hacerlo, yo ya ando lista para entrar al agua 💧🤭 

C: 😳😳 me andas escribiendo encuerada?

S: Quizás... te molesta? 🤭

C: No, bueno no sé, es solo que por un segundo te imaginé 😅 pero no me malinterpetes jaja solo fue mi imaginación 

S: Jajaja pues si quieres puedo ayudarle a tu imaginación 😉😏

C: Eh? A qué te refieres?? 😳😳😳



Después de enviarle la foto, fue cuestión de segundos para que yo recibiera una foto de regreso por parte de ella. Vaya cuerpo que tenia Claudia, de no ser porque aun era la primera vez que hablábamos no tuvo la confianza suficiente de hacer una videollamada para bañarnos juntas aunque sea a distancia. De cualquier manera esto era solo el inicio y aun tendriamos muchas conversaciones por venir, después de todo aun no le he enviado el sitio donde adquirí mi ropa deportiva, es un buen pretexto.



jueves, 5 de agosto de 2021

El asalto de cuerpo, capítulo 3.



 Mi vida es una pesadilla. Estoy sola, con frío, hambre y dolor en los huesos. No hay ninguna noche en que no llore.

Hace 2 días vi a mi papi pasar en el callejón, corrí hacia él para abrazarlo y pedirle ayuda, pero él pensó que iba a asaltarlo así que me aventó una botella de vidrio que había en el suelo y salió corriendo. Por suerte no me dio, o de lo contrario habria sido muy doloroso.

Así pasaron otro par de días hasta que una cara conocida se cruzó conmigo. Era el muchacho que me había levantado ese día en que perdí mi cuerpo. Él se acercó a mí mientras yo estaba sentada entre unas cajas.


"Hola señor, ¿cómo esta?" Me preguntó amablemente.

No sabía qué responderle y solamente me quede mirándolo. 

"No se preocupe" me dijo sonriendo. "No tiene qué decirme nada, yo sé que debe ser difícil vivir así, el otro día que lo ayudé pude ver que estaba asustado."

"Yo... eh... pues sí, no entenderías lo que estoy pasando" le respondí con algo de pena.

"No, y la verdad es que no deseo que nadie viva en esta situación, por eso quiero ayudarlo, tenga, tome" el muchacho entonces sacó de su mochila un sandwich cocido junto con una botella de agua fresca.

Le agradecí y procedí a comer el sandwich de prácticamente un bocado. El muchacho se sentó junto a mí. 

"Sí que debe tener hambre, no habia visto que alguien coma tan rápido " me dijo. 

Moría de pena al escuchar eso pero por otro lado no me importó tanto. "Sí, bueno, es que hace cono 2 días que no como nada, lo último fueron unos restos de manzana que alguien no gastó." 

"Ya veo, no se preocupe Don... ¿cómo se llama?" Me preguntó interesado.

La verdad no tenía idea de cuál era mi nombre, ahora, claramente no podia decirle Sofia o se reiría... "Alberto" le dije con algo de dudas, ese es el nombre de uno de mis tíos. 

"Mucho gusto Don Alberto, yo me llamo Luis". Me dio la mano mientras sonreía. La verdad es que su sonrisa era muy linda, y él en sí era guapo. Sin darme cuenta comencé a sonreirle de forma un tanto torpe.

Los dos comenzamos a platicar después de eso. Él me dijo que trabaja en un centro comunitario cercano en el que se dedican a ayudar a gente necesitada. Él quiso ayudarme el otro día pero yo estaba tan asustada que lo espanté. Afortunadamente tiene un alma caritativa y decidió regresar para darme otra oportunidad. Si estuviera en mi cuerpo sin duda ya le hubiese robado un par de besos, pero no podía. 

Después de casi una hora de plática, él me dijo que lo acompañara a su trabajo, a lo cual me negué en un inicio, pues yo quería seguir aquí y buscar la oportunidad nuevamente de ver a mis papis. Pero Luis insistió y al final accedí. 


Al llegar al lugar, 2 chicas me recibieron con una sonrisa, me sorprende que sean tan amables a pesar de que tengo la apariencia de un viejo raboverde cochino. Me ofrecieron darme un baño a lo cual accedí, sin embargo una vez dentro, me costó muchísimo trabajo verme al espejo. Yo he tenido un par de novios antes pero no se podia comparar a estar en el cuerpo de un hombre. Me quité la camisa y luego el pantalón, al quedarme en ropa interior sentí mucha pena y con los ojos cerrados terminé de desnudarme. Poco a poco los fui abriendo y abrí la llave del agua para empezar a bañarme. Sentí mucha repulsión mientras pasaba el jabón por mi cuerpo, ver el agua quedando café por la mugre que salía de mí y encima tener que tocar el pene de este hombre me provocaba náuseas. Terminé lo más pronto que pude para salir del baño.

Me brindaron ropa nueva y una cama para dormir momentáneamente, tampoco podia quedarme ahí para siempre. Esa noche me acosté por fin en una cama después de ya no sé cuánto tiempo, los días eran eternos. Mi espalda me dolía tanto que al sentir el colchón fue como un abrazo al alma. Esa primera noche a pesar de la comodidad me costó poder dormir, me despertaba una y otra vez por las pesadillas que tenía, no dejaba de pensar en lo que podría estar pasando con mi cuerpo. Si mis papás se darían cuenta, si mis amigos lo notarian o incluso si aun seguía vivo.

A la mañana siguiente me brindaron desayuno, en una de las mesas del comedor vi a Luis, así que rápidamente me acerqué a hablarle.

"¡Don Alberto! Qué gusto saludarlo y que esté bien" me dijo sonriendo y haciendome un espacio en su mesa. 

"Me alegra mucho verte Luis, al fin una cara amigable" le respondí con una sonrisa de oreja a oreja.

Me senté junto a él y mientras comíamos me comenzó a preguntar sobre mí. La verdad es que evadi sus preguntas como pude ya que no sabía nada de esta vida, pero él insistió en querer saber sobre mí, asi que inventé una historia en la que nunca me casé ni tuve hijos, y mis padres habían fallecido hace tiempo sin dejarme nada.

"Siento mucho escuchar lo de tus padres, oye ¿y no intentaste encontrar algún trabajo o algo?" Me preguntó. 

"No, en ningún lado he trabajado" le contesté. La verdad es que nunca he trabajado, hasta ahora siempre viví con mis papis, pero no podía decirle eso.

"¿Por qué? Yo creo que sí podría trabajar bien, lo veo saludable, no veo por qué no lo contratarian". Me comentó siendo positivo. 

Simplemente sonreí y me sonroje un poco. "Es que huelo feo" le dije antes de soltar una pequeña risa. Ambos reimos por unos segundos.

"No lo había visto sonreir asi Don Alberto, me da gusto que cambie su semblante" me dijo mientras me daba unas palmadas en la espalda. Yo simplemente me sonroje un poco más pero al escuchar "Don Alberto" mi ilusión se vino abajo ya que recordé que ahora este soy yo.

Luis se fue momentos después en cuanto terminó su comida. Me prometió que vendría a comer conmigo mañana para seguir platicando. Creo que es el momento que más espero en el día, si tan solo pudiera contarle todo. Pero desafortunadamente seguro terminaría en un manicomio.

Esa noche me acosté con muchos pensamientos en mi mente. Por un lado la preocupación de qué estaba pasando en mi cuerpo y vida me seguía comiendo por dentro, y por otro lado pensaba en Luis y su sonrisa. Extrañamente mientras pensaba en él, el pene de este cuerpo comenzó a moverse, cosa que nunca había sentido, era como si palpitara ante mis pensamientos. Decidí pensar en otra cosa, pensaba en mis papis y en cómo podría contactarlos para que me escucharan. Esa noche apenas pude descansar.


martes, 3 de agosto de 2021

El asalto de cuerpo, capitulo 2.





Mi plan funcionó a la perfección. Mi vida tuvo un giro inesperado y ahora estoy mejor que nunca.
Después de perder todo mi dinero y terminar en la calle, entré en una profunda depresión, vagando las calles y rogando por comida, no podía creer en lo que me había convertido. 

En medio de esta situación no veía ninguna salida más allá de acabar con mi vida. Ya nada tenía sentido sin mis propiedades. Todo por culpa de mis malas decisiones. Mi apariencia ya era la de un viejo a pesar de tener apenas 37 años, mi cabello y barba habían crecido y estaban desalineadas. No tenía donde dormir por lo que me acomode entre unas cajas de cartón en medio de un callejón. Ahí casi no pasaba nadie más que los vecinos de una calle privada cercana. Desde ahí veía pasar a algunos señores y señoras que tenían una vida mucho más privilegiada que la mía. Bueno ahora cualquier cosa es mejor que vivir en cajas.
Al querer acercarme a las personas, corrían asustadas por mi apariencia y olor, llevaba meses sin darme un baño. 

Hurtando entre la basura un día encontré una caja que en su interior contenía un amuleto y una inscripción en un papel. Según se decía ese amuleto te podía "cambiar la vida". Supuse que eran tonterías pero el amuleto se podria vender por algo de dinero. Al tener el amuleto en mi bolsillo, pensaba dirigirme a una casa de empeños cuando me crucé con una chica muy hermosa, no la había visto antes pero en verdad me enamoré a primera vista. Al parecer habitaba en la calle privada. Me desvíe del camino para seguirla y hablarle pero ella iba muy por delante y al intentar acercarme, un guardia de seguridad de la privada me interceptó únicamente para soltarme un golpe y después sacarme de ahí. 

Adolorido, me refugie entre mis cajas. De repente un niño pequeño se acercó a molestarme, le agarré el brazo para detenerlo y en el impulso estuve a punto de soltar un golpe pero el amuleto de mi bolsillo soltó un brillo que nunca habia visto antes, y al recuperar la vista me vi a mí mismo pero desde un punto de vista muy bajo. Estaba en el lugar del niño, ¿pero cómo? En eso, mi  cuerpo comenzó a gritar asustado "¡Mamá! ¡Mamá!". El niño y yo cambiamos de cuerpos extrañamente. Aun con mi baja estatura logre taparle la boca para que se calle, luego de eso deseé regresar a mi cuerpo con lo que el brillo salió de nuevo. Segundos después estabamos cada quien en su cuerpo. El niño huyó corriendo buscando a su mamá pero al ser un niñito nunca le creerán lo que pasó. 

Lo importante ahora es que habia descubierto el uso de este amuleto, y lo único que se me vino a la mente era esa niña. Quería estar en su lugar y tenerla para mí. 
Fue entonces que comencé a planear cómo sucedería. La segui durante unos días y me aprendí sus rutinas y horarios. Solo fue cuestión de esperar al momento indicado para hacer el cambio. 


Después de acorralarla, la pobrecita se desmayó en mi cuerpo, lo que me dio tiempo suficiente para huir hacia mi nueva casa, no sin antes advertir al guardia que un viejo depravado me habia estado siguiendo y estuviera alerta.
Lo extraño y desafortunado es que al hacer este cambio, el amuleto simplemente se desvaneció asi que supongo que estaré en este hermoso cuerpo para siempre, no me molesta en absoluto.



Al llegar a mi habitación lo primero que hice fue quitarme la ropa para conocer a fondo cada rincon de mi nuevo ser. Todo era increible, esta niña es hermosa desde donde la veas, sus nalgas, pechos, todo está en su lugar. 
Al ver mi reflejo no podia dejar de sonreir mientras veía mi cuerpo desnudo. No pude evitar darme un par de nalgadas, lo cual generó un cosquilleo en todo mi ser, wow nunca había sentido algo así antes. Ver los ojos de Sofía con mi mirada lujuriosa me hacia sudar, no había duda, me estaba excitando como nunca antes. Me acerqué al espejo a besar mi reflejo, era como besarla a ella apasionadamente, mientras hacía esto comencé a sentir un calor imparable en mi entrepierna, al colocar mi mano sentí una humedad que casi me hace caer al suelo. Llevé mis dedos húmedos a mi boca para saborear ese delicioso líquido. En toda mi vida nunca me había sentido tan excitado. En la emoción no perdí ningún segundo en abrir mis piernas y frotar mis manos en su vagina, era tanta mi excitación que cada vez frotaba con más fuerza y comencé a meter mis dedos, primero solo uno, luego dos y finalmente 3 dedos. Empecé a gemir y escuchar los gemidos me hacían seguir más, al punto en que mi cuerpo expulsaba tanto sudor como el líquido de la vagina.
Al final llegué a un orgasmo, el mejor de toda mi perra vida. Cuando me calmé, vi que había hecho un pequeño desastre con las sábanas y la cama. 
Al ver mi reflejo desnudo en el espejo solo pude pensar en que seguro no tendré problemas en conseguir lo que yo quiera jeje.

Luego de unos días en esta vida, todo era aburrido. "Sofía" era una aburrida niña de casa, todo este cuerpo bien formado se estaba desperdiciando terriblemente. Así que hice lo que ella debió hacer hace tiempo, vender fotos y videos íntimos para conseguir más dinero del que no habia tenido antes. Los ingresos eran grandes al punto en que decidí mudarme a otra casa e independizarme, este era el inicio de una nueva vida lujosa y todo gracias a esta niña y el amuleto.

lunes, 2 de agosto de 2021

El asalto de cuerpo. Capítulo 1



Mi nombre es Sofía. O al menos ese solía ser mi nombre, ahora ya no sé quién soy. Mi vida cambió por completo aquel día en el que un viejo pervertido intercambió nuestros cuerpos, sí, ya sé que suena demasiado loco pero es real: este viejo de no sé cuántos años soy yo.



No tengo la menor idea de cómo lo hizo, pero él está en mi cuerpo, mi dulce y delicado cuerpo esta en manos de un pervertido. De solo pensar en lo que debe estar haciendo me hace llorar del asco e impotencia. ¿Cómo sucedió esto? Yo solamente había salido a comprar un encargo de mi mami y al pasar por un callejón me topé a ese señor. Juré que me iba a asaltar, ese callejón siempre me hace temblar del miedo cuando paso por ahí, es un tanto estrecho y casi no está iluminado, pero es el camino más directo para la tienda.

Al ver que se acerque a mí no pude evitar llorar suplicandole que tome mi dinero o lo que quiera pero que no me hiciera nada. De tan solo recordar su risa y su voz vuelvo a tener escalofríos, y lo peor es que ahora yo tengo esa voz. En mi mente solo puedo escuchar cuando dijo "tranquila, no voy a hacerte daño, tu cuerpo es muy sabroso y útil".

Del pánico simplemente cerré los ojos e intenté gritar pero sus manos rápidamente taparon mi boca, traté de correr pero él era más fuerte que yo. Él me tenía entre sus brazos y eso es lo último que recuerdo, debo haberme desmayado del terror, creí que iba a morir o que él iba a abusar de mí. 

Todo resultó peor. Al recobrar la conciencia, estaba en el suelo mirando el cielo desde el suelo. Seguía en el callejón pero se sentía todo distinto, al intentar hablar para pedir ayuda, de mi boca salió una voz gruesa que reconocí al primer segundo. Creí que el pervertido seguía ahí y habia opacado mi grito pero conforme segui pidiendo ayuda me di cuenta que la voz salía de mí. Casi al instante un muchacho se acercó para ayudarme a ponerme de pie.

"¿Qué le pasó señor? ¿Está bien?" Me preguntó. 

Yo asustada le pregunté qué le pasaba, que yo no era ningún señor. Pero a media frase me di cuenta que mis tiernas manos ahora eran sucias y porosas, como las de mi papá después de trabajar. Asustada miré hacia abajo para mirar la ropa del pervertido, y peor aun, su cuerpo. Yo era ahora el señor. Comencé a gritar del susto pero el muchacho sujeto rápidamente para calmarme. "Tranquilo señor, todo va a estar bien. ¿Necesita que llame a alguien?" Me dijo. Admito que era lindo de su parte, además de que era atractivo, pero mi susto era tan grande que sin querer le di un manotazo y le pedí que me dejara sola. Él se marcho mientras me veia con una cara de susto.

Desde ese día mi vida ha sido un desastre total. No tengo idea de quién soy ahora, este señor no llevaba consigo ninguna identificación ni dinero, al parecer era un vago de la calle sin oficio. Intenté ir a mi casa para hablar con mis papis, pero mi casa está en una calle privada y el guardia me ha dado un par de golpes cuando me echa de ahí. No sé qué hacer, pero desde lejos he notado que mi cuerpo no está en mi casa y últimamente he visto algunas patrullas rondando la zona. Solo espero que mi cuerpo se encuentre bien y que el pervertido no cometa alguna barbaridad. 

Mientras tanto no me queda más que vagar por las calles y esperar que la gente me dé dinero para poder comprar algo de comida. Es horroso, yo era una linda chica universitaria, no debo estar pasando por esto. Yo tenia una vida hermosa, de solo pensar en esto no puedo evitar llorar nuevamente.






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