sábado, 1 de enero de 2022

El asalto de cuerpo, capítulo 7

(Antes que nada, quiero desearles un feliz año nuevo y ojala su 2022 sea muy bonito y les traiga felicidad y paz. Por lo pronto les comparto un nuevo capítulo para comenzar el año con las mejores ganas)

...




No puedo creer lo que ese enfermo ha hecho con mi vida, me ha destrozado por completo mis sueños e ilusiones. No podia hacer nada más que llorar de la rabia e impotencia. Me encontraba sentada mirando "mi" sitio porno, o bueno el sitio de "Zoffi". Por Dios qué horrible apodo, ni siquiera es creativo. Tenía que apurarme ya que estaba usando la laptop de Luis mientras él se bañaba. Al mirar las sesiones de fotos tenía muchos sentimientos encontrados, sentía rabia y queria matarlo, y al mismo tiempo tengo que admitir que mi cuerpo se veia endemoniadamente delicioso... no espera, no puedo sentir eso, esa soy yo.


Esta foto es hermosa en verdad, esa lenceria negra con mi tono de piel combina demasiado bien, y esos abs no los tenía, nunca me dediqué a entrenar o hacer mucho ejercicio, vaya hermosura y cuerpazo. El lado positivo es que mi cuerpo se mantiene en gran forma y me veo más antojable que nunca... espera ¿porqué dije antojable? No, no, no puedo pensar eso... y también ¿porque mi pene se está poniendo tan duro? ¿Qué es esto que siento? No puedo estar excitada conmigo misma.
En medio de mis pensamientos y conflicto interno no me di cuenta que la puerta del baño se abrió, saliendo Luis con una toalla y mirandome usando su lap.

- "Eh... ¿interrumpo algo?" Me dijo con una voz apenada.
Del susto no pude evitar soltar un grito y ponerme de pie.

- "No, no, no. Luis, no es lo que parece".
Luis simplemente soltó una risa.

- "Beto, tranquilo, a todos nos pasa, y más con esa niña que tienes ahí en la compu... y veo que te gusta mucho, ¿eh?" Me dijo mientras veia de reojo mi erección. 

- "No, en verdad, no es eso, yo... yo..." mi cara quedó roja de la pena y me quedé sin palabras.

- "Hey, tranquilo, es normal bro, solo que la próxima si quieres privacidad puedes decirme y te dejo solo el tiempo que necesites". Me dijo entre risas. "Oh, y espero que ese sitio no tenga virus, o me pagarás una laptop nueva". Agrego antes de irse.

Yo estaba muerta de la pena, no sé qué es peor, explicarle que esa niña de la pantalla soy yo en realidad o explicarme a mí misma porque me siento tan caliente viéndome. 
Al final decidí apagar la laptop e irme a dormir, pero mi mente seguía dando vueltas alrededor de cómo será la nueva vida que ese degenerado le ha dado a mi cuerpo. Necesito contactarlo más allá de un simple mensaje electrónico. 

Al día siguiente en la obra mi mente seguía dispersa pensando en mi cuerpo, aun tenía sentimientos encontrados, mis nuevas hormonas me provocan un deseo enorme de seguir admirando las fotos y tocarme, ayer creo que si no fuera por la interrupción de Luis muy probablemente haya cedido a la tentación, incluso mi mente fría y calculadora no se podia resistir a mis nuevos deseos carnales. Pero por otro lado solo pensaba en qué manera podría encontrarlo físicamente.  En medio de todo esto, estaba tan distraída y dispersa que no escuché cuando mis compañeros me gritaron que me hiciera a un lado porque habían soltado sin querer un martillo el cual cayó sobre mi cabeza, afortunadamente tenía el casco puesto y solo resultó en un golpe que me dejó un poco mareada y aturdida por unos segundos, a pesar de esto perdí el equilibrio y cai al suelo, por lo que rápidamente se acercaron a ver que estuviera bien.

- "Beto, Beto, Beto ¿me escuchas?" Iván dijo preocupado.

- "Pendejo te dije que tuvieras cuidado con ese martillo" Kevin gritaba regañando a Jerry, quien habia dejado caer el martillo.

- "Fue sin querer, se me resbaló porque no pusiste bien la escalera, cabron". Le respondió enojado.

- "Estoy... estoy bien, creo" les dije mientras intentaba levantarme, pero seguia algo mareada asi que tuve que quedarme sentada un momento.

- "Esa estuvo cerca, Beto, si no tuvieras casco no la contabas, y yo que siempre te critiqué por usar casco" dijo Ivan mientras soltaba una risa nerviosa. Él nunca se ponía el casco y además invitaba a los demás a no usarlo porque le daba calor y eso era para cobardes según.  Al menos espero que haya servido para que reflexione sobre la seguridad.



- "A un lado todos, grupo de irresponsables, dejenme pasar" Dijo una voz autoritaria, se trataba del supervisor de la obra acercándose a ver que yo estuviera bien. "Beto, qué bueno que sigues entre nosotros, ven conmigo". Él me ayudó a levantarme y me llevó a su pequeña oficina improvisada en medio de la construcción. 

- "Estoy bien, señor, no se preocupe, ahora mismo regreso a trabajar" le dije intentando salir de ahi, no quería que me cuestionara mucho. 

- "No, no, nada de eso, no regresarás". Me dijo en un tono muy serio.

- "¿Qué? ¿Por qué? Me siento bien". Le respondí preocupada, pensé que estaba despidiendime así que intente hacer un "4" pero perdí el equilibrio y casi caigo de nuevo al piso.
Él simplemente me miro seriamente, desaprobando lo que yo hacia. 

- "Beto, por favor siéntate". Me dijo haciendo un gesto con las manos. "Escúchame, tú sabes bien que no tienes papeles ni mucho menos un seguro médico, si te dejo estar aquí es porque me transmitiste confianza. Me estoy jugando mi trabajo, ¿sabes?. No puedo dejar que regreses ahí luego de ese golpe. Así que debo pedirte que te retires por hoy y descanses, te espero mañana a primera hora, y espero que andes más atento o ya no habrá otra oportunidad, ¿entendido?".

- "Si, señor, entiendo". Le respondí con la mirada baja, él tenía razón y no podia dejar que por mi culpa él perdiera su trabajo.

Luego de eso me retiré del lugar en camino al depa de Luis, en el camino solo pensaba en cómo podía llegar hasta mi cuerpo, lo único que se me ocurrió fue visitar el sitio web y buscar algún dato que pudiera ayudarme, así que me apresuré en llegar rápido. Afortunadamente era temprano, no era ni mediodía así que Luis estaba fuera y no llegaría hasta la noche, asi que pude agarrar su laptop nuevamente. 
Al abrir el sitio me encontré a mí misma posando e invitando a tener pensamientos morbosos. Cerré los ojos fuertemente para concentrarme y comencé a buscar en cada rincón del sitio, todas las descripciones, fondos de las fotos, etc. Lo único que hallaba era un correo electrónico pero ese ya lo tenía desde antes. En medio de mi búsqueda con tantas fotos, fue inevitable que mi pene se pusiera duro de nuevo, demonios no me dejaba concentrarme, sentía cómo palpitaba, era casi como si me hablara y me exigiera acción. Trataba de enfriar mi mente pero era muy fuerte el deseo así que comence a palparlo y agarrarlo con toda mi mano. Al inicio sentía asco pero mientras más lo tocaba y se enderezaba, más se desaparecía esa sensación y en su lugar solo sentía más ganas de seguir y jalarlo más rápido. No sé cómo describirlo, en mi cuerpo original me había tocado de la excitación, pero era totalmente distinto. Sentía que mi pene se apoderaba de mi voluntad y finalmente cedí, cada vez era más rica la sensación. Comencé a pasar por varias fotos para excitarme más y por mi mente pasaban imágenes de todo lo que le haría a esa vieja tan sabrosa de la pantalla si la tuviera conmigo.

Luego de unos minutos finalmente logré sentir mi primer orgasmo en este cuerpo, y debo admitir que se sintió glorioso. Pero después de unos segundos mi mente se empezó a enfriar, comencé a sentirme culpable y un poco triste al mismo tiempo. ¿Acaso me masturbe mirando mi propio cuerpo? ¿Por qué dije vieja sabrosa? Por unos segundos incluso me desconocí completamente y solo veia a una mujer hermosa, pero por fortuna ahora mi mente esta fría y puedo pensar con más claridad. Ahora veo porque los hombres se comportan asi cuando quieren coger a una mujer. 

Ya con la mente calmada continué mirando las fotos objetivamente. 
Algo que percató mi atención es que en un par de fotos se alcanzaba a ver la ventana de un cuarto y lograba distinguir los edificios que se veían al fondo. ¡Era la misma ciudad! Al parecer no fue muy lejos... sí, es el otro lado completamente de la ciudad pero creo reconocer la zona. Ahora solo es cuestión de buscar el edificio, con lo que aprendí de arquitectura básica en la construcción y los ángulos de los edificios, pude triangular la ubicación de las fotos, o al menos la zona. Espero que aun siga viviendo ahi, al parecer la última foto que subió ya tiene unas semanas.


Me dirigí al otro lado de la ciudad vistiendo una sudadera y una capucha puesta, no quería que por error mi cuerpo me llegase a ver o reconocer. Finalmente llegué a la zona. Recuerdo que en una foto se alcanzaba a distinguir una parte del edificio de en frente así que no habia duda de que estaba en el edifucuo correcto, pero ¿cómo encontrar el departamento? Quizas tenga que esperar aquí afuera hasta que mi cuerpo salga o llegue.  

Luego de un par de horas no habia tenido éxito, por lo que me arriesgué a ingresar al edificio, evadiendo la seguridad y al portero. En un pasillo me encontré a una chica bastante linda cargando una bolsa con pan. Me acerqué a hablarle para preguntar si conocía a alguna "Sofía" pero creo que por mi misma apariencia la asusté y simplemente evadió mis preguntas por más que traté de ser amigable.
Me parece que tendré que seguir viniendo al edificio hasta encontrar mi cuerpo.





6 comentarios:

  1. Yo soy team sofi, ojalá recupere su cuerpo

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  2. Me gusta el camino que está tomando la historia

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  3. Muy buena parte, ojala sofi recupere su cuerpo.

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  4. Ojalá que Sofi no recupere su cuerpo ��

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  5. Woww es la primeta vez que leo tu historia! Y la verdad se va poniendo cada vez mejor,!!!

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